Me han pedido que empiece por contar de donde viene su nombre "Entrelazadas".
Fue un regalo.
En el verano del 2010, estába veraneando con una amiga, la coprotagosnitas de esta historia, con su hija, una amiga de su hija y mi hijo, en un pueblecito precioso del que tengo unos recuerdos inolvidables.
Esta, por aquel entonces, amiga mía, ya tenía abierto un blog. Muchas veces le comenté mi gran idea de escribir dos libros (como esto ahora no viene al caso ya lo explicaré más adelante), una idea que me atrapaba y atrapa el pensamiento de forma alucinante. Después de desayunar me dijo que había tenido una idea que me iba a gustar: iba a abrir un blog para mi. En él podría escribir esa lluvia de ideas que tenía sobre estos libros y ella, o quien quisiese, los podría comentar.
Jamás podré explicar lo que sentí en ese instante. No solo me introducía en el mundo de los blogs, sino que, por fin, alguien creía en mis proyectos.
Así abrimos "Latidos de verano" al que invito a todos porque, a pesar de los pesares, el sigue latiendo y a punto de celebrar su cumpleaños al que espero no faltéis.
Nuestra relación fue muy apasionante, divertida, confidencial pero también muy dura.
Para un cumpleaños suyo quise dejarle claro y por escrito que yo la quería muchísimo y que su amistad me llegaba hondo y como tantas veces hablamos de escribirla me aventuré y le abrí un blog llamado "ENTRELAZADAS".
Una mañana me levanté, cogí esta idea y este nombre sonó en mi cabeza sin más. Creíble o no lo escuché en mi y así lo escribí.
Era una palabra que nos definía muy bien, estaba en plural. Estábamos entrelazadas (yo aún me siento así).
Por circunstancias propias de un post único solo diré que este blog ya no es aquel. En una de las tormentas, cuando ella ya lo había cerrado, recogí pedazos que quedaban por la red y en mi alma y abrí este nuevo, desgraciadamente en singular pero con el amor que se recoge a un hijo que se había perdido y vuelve a tus brazos.
De mis tres blogs, cada uno con sus amores únicos, Entre es el que me da más ternura. Fue creado por ensayo y error hasta largas horas de la madrugada, fue mimado y regalo, despreciado y perdido y ahora vuelve a estár mimado, cuidado, sentido hasta el punto de retomar la idea madre de ser el motor de una bella historia de amistad.
Una vez escribí un artículo muy divertido que estará flotando por el ciberespacio de la firma de libros de un ejemplar de Entrelazadas. la más bella historia de amistad jamás contada.
